TNU baterías litio

Tratamiento Neumáticos Usados, S.L. (TNU), Sistema Colectivo de Responsabilidad  Ampliada del Productor (SCRAP) en el que se agrupan los principales distribuidores e importadores de neumáticos de España y sociedad sin ánimo de lucro, sigue con su campaña de información y concienciación general sobre el reciclaje y tratamiento de los neumáticos fuera de uso (NFUs) bautizada como “¿Sabías qué…?”, y en esta ocasión, resalta que “se pueden utilizar neumáticos fuera de uso para fabricar baterías de litio”.

 

En concreto, TNU (Tratamiento Neumáticos Usados) alecciona que “uno de los principales compuestos de los Neumáticos Fuera de Uso (NFU) es el negro carbón, que constituye el 22% de su peso y se utiliza como aditivo para fortalecer el caucho, aumentando así su resistencia a la tracción y al desgaste. El negro carbón se puede extraer de los NFU mediante pirólisis, un proceso de tratamiento térmico a altas temperaturas sin oxígeno. Posteriormente, el negro  carbón recuperado se puede transformar en carbono grafitico duro, un componente esencial en el ánodo de las baterías de iones de litio de los vehículos eléctricos. Este método, desarrollado por T-Phite, no solo permite reciclar los neumáticos, sino que también puede ser un hito en la fabricación sostenible de componentes para baterías de litio.”

 

Y añade que “la capacidad de carga de los ánodos de negro de carbono recuperado es comparable a la de los de grafito convencionales, pero el verdadero valor de esta innovación, además del potencial significativo que permite mejorar la eficiencia y durabilidad de las baterías de los vehículos eléctricos, reside en su contribución a la economía circular y a su menor impacto ambiental, al reducir la necesidad de extraer grafito, un proceso intensivo en recursos y perjudicial para el medio ambiente. En cada batería de iones de litio de un coche eléctrico hay una media de 52 kg de grafito, el 25% de su volumen. Su suministro procede en su mayor parte de China y se ha vuelto vital en un momento de expansión para los vehículos eléctricos. Para fabricar una batería se necesitarían aproximadamente la goma transformada en carbono grafitico de 21 neumáticos fuera de uso”.

 

TNU: “En cada batería de iones de litio de un coche eléctrico hay una media de 52 kg de grafito, el 25% de su volumen. Su suministro procede en su mayor parte de China y se ha vuelto vital en un momento de expansión para los vehículos eléctricos. Para fabricar una batería se necesitarían aproximadamente la goma transformada en carbono grafitico de 21 neumáticos fuera de uso”.

 

TNU incide en que “los NFU, que tradicionalmente presentan retos en su reciclaje, encuentran así una nueva vida en aplicaciones de alta tecnología, además de ofrecer una solución práctica a la gran cantidad de materia prima secundaria obtenida de ellos, transformándolos en componentes valiosos para la industria y la movilidad sostenible. Recordemos que cada año se desechan en España más de 295.000 toneladas de neumáticos fuera de uso, 3,5 millones de toneladas en Europa y 29 millones en el mundo. Son un grave problema medioambiental, y su valorización y reciclaje se hacen fundamentales para conseguir los objetivos de desarrollo sostenible marcados para el 2030”.

 

Como broche, TNU recuerda que es “un Sistema Colectivo de Responsabilidad Ampliada del Productor (SCRAP), en el que se agrupan las principales empresas de reciclaje de neumáticos fuera de uso, productores de neumáticos nuevos y renovados, empresas gestoras de NFU, importadores y distribuidores de neumáticos, etc., y cuya actividad contribuye a que se reciclen las toneladas de neumáticos fuera de uso que se generan cada año en España. Es una sociedad sin ánimo de lucro creada al amparo del Real Decreto 1619/2005. Legislación por la que se regula obligatoriamente la gestión de los neumáticos fuera de uso, aprovechando al máximo todos sus componentes (caucho, metal, tejidos, etc.)”.