ADINE, la Asociación Nacional de Distribuidores e Importadores de Neumáticos, que representa al 80% del sector de la distribución de neumáticos en España, contando entre sus asociados con distribuidores, importadores, diversos fabricantes y talleres de neumáticos, acaba de emitir un comunicado recordando a todo el sector “la importancia de realizar un correcto almacenamiento de los neumáticos para garantizar que estén en las mejores condiciones posibles cuando vayan a ser montados en un vehículo”.

ADINE enfatiza que “considera fundamental que los distribuidores especializados lleven a cabo un correcto almacenamiento de los neumáticos que asegure, en la medida de lo posible, que estos estén en las mejores condiciones posibles cuando vayan a ser montados en un vehículo. Por ello, es importante seguir unas pautas básicas para almacenar de forma correcta los neumáticos como, por ejemplo, mantener la zona de almacenamiento a temperatura ambiente, es decir, en un lugar fresco y seco o, lo que es lo mismo, que la temperatura se mantenga entre los 15ºC y 25ºC y especialmente al resguardo de la luz directa del sol, ya que el ozono tiene un efecto corrosivo sobre el caucho. En general, hay que tener en cuenta también que el almacén o las zonas de almacenamiento deben estar limpias y correctamente ventiladas, y los neumáticos deben estar siempre lejos de cualquier fuente de calor, de cualquier sustancia química, productos de limpieza o aceites, así como de maderas o metales puntiagudos, que pudieran deteriorar la goma”.

Consejos de almacenamiento

ADINE también subraya la necesidad de que “los neumáticos sean almacenados en condiciones adecuadas, libres de tensión, compresión u otras situaciones que puedan ocasionar deformaciones permanentes. Para ello, una forma efectiva de realizarlo es mediante el almacenamiento vertical de los neumáticos, uno junto al otro en los estantes. Otra alternativa es apilar los mismos en posición horizontal (uno encima del otro) en pilas de poca altura, siempre y cuando, estén libres de cualquier tensión. Sin embargo, esto último puede provocar que sea más difícil llegar a los neumáticos de la parte inferior, aumentando la cantidad de veces que el neumático tenga que ser manipulado mientras está almacenado, lo que haría necesario implementar un sistema de rotación de existencias”.

ADINE prosigue aconsejando que “estas pautas de almacenamiento de neumáticos no solo se aplican a los neumáticos nuevos, sino también a los neumáticos almacenados de manera estacional en el caso de utilizar un juego de neumáticos de repuesto, como por ejemplo, los neumáticos de invierno. Así, si el neumático y la llanta van a ser almacenados de forma conjunta, es decir, montados, lo mejor es colocarlos inflados con la presión recomendada por el fabricante y apilados uno encima del otro, o bien colgados, siempre y cuando el gancho del que cuelguen no cause ningún daño a la llanta y al neumático. Si por el contrario van a ser almacenados sin llanta, la mejor forma sería hacerlo en posición vertical, dejando cada neumático apoyado sobre su banda de rodadura y girándolos cada cuatro semanas para que no se deformen. Por último, cabe recordar también que a la hora de manipular neumáticos hay que utilizar los instrumentos y equipos adecuados que no dañen los neumáticos, siendo recomendable utilizar guantes y ropa adecuada”.